Día 18: Jueves 23 de mayo, 2002. Ejido Eréndira.

Hora: 6.45 a.m. Temperatura: 11ºC. Humedad: 63 Presión B. 30.3

Soleado. Radiante pero frío. El ventarrón, desapareció como llegó, en las primeras horas de la madrugada. El parabrisas cubierto de vapor en el interior. No se distingue bien el exterior, sólo por las ventanas laterales. Nos preparamos para las actividades de la mañana. Después de desayunar bajaremos a la escuela secundaria.

Hora: 2.19 p.m. Estamos de vuelta en la colina, nuevamente en el terreno del DIF. En la escuela secundaria nos regalaron tres apios que trajeron de la empacadora. Mari los guardó en el refrigerador, junto con las alcachofas. Tenemos verdura para varios días. En un pequeño puesto de mariscos, conseguimos pulpa de jaiba. No está nada barata, aunque estamos justo en donde las atrapan. Nos vieron cara de gringos, aún cuando traemos el nopal en la frente, y les dije que somos mexicanos. A $ 125.00 el kilo. ___¡Bien vale la pena darnos ciertos lujos de vez en vez ¡___

La Escuela Secundaria Técnica No. 38 a cargo del Profr. José Manuel González L., fue nuestra anfitriona el día de hoy. Nos atendieron muy amablemente y trabajamos con el proyecto “Astronomía por México” hasta la hora de salida de los alumnos. Consta de tres grupos, 1o. , 2o, y 3o. Muy pocos alumnos, Aproximadamente unos 100. Cinco Profesores. La secretaria Zaida Corrales nos hizo un oficio de agradecimiento. Desafortunadamente el director no se encontraba el día de hoy. Festejaron el día del estudiante. Mañana saldrán de excursión a unas albercas cercanas a la ciudad de Ensenada. En un solo salón de clases concentramos unos 50 alumnos, a los cuales les dimos la platica. Observamos el sol y las manchas solares. Se les invitó a la sesión nocturna que realizaríamos en los terrenos del DIF municipal, lugar donde estamos en este momento, pidiéndoles que hicieran extensiva nuestra invitación a sus padres, vecinos y amigos, para que se nos unan esta noche aquí, a partir de las 8 p.m.

“Astronomía por México” en la Esc. Sec. Técnica No. 38, Ejido Eréndira BC.

Terminadas nuestras actividades en la escuela, nos dirigimos a las instalaciones del inmenso criadero de abulones “ BC. Abalone “, que una compañía gringa ha establecido en este lugar. No se pude hacer ninguna visita sin autorización. La Biólogo, Rocío Mancilla, nos indicó que más tarde llegaría su jefe inmediato superior, a quien debíamos de pedir el permiso para la visita, sin embargo debido a que no sabía la hora exacta en que regresaría, le dimos nuestros datos y además le informamos que esa noche estaríamos trabajando en los terreno del DIF. Se interesó mucho en nuestra actividad, llamó a su jefe para informarle de nuestra presencia en ese lugar y de nuestro interés de conocer las instalaciones. Nos dijo que el Biólogo Alfonso Orozco personalmente iría más tarde a visitarnos y a indicarnos a que hora nos podrían recibir el día de mañana. (La SABC, nuevamente nos abría puertas.

Mari está preparando ensalada de jaiba con verduras para la comida. Ya casi es hora de comer.

Descansamos por la tarde, es necesario hacerlo siempre, porque el ajetreo en la noche, siempre resulta cansado, y nunca sabemos a que hora de la noche vamos a terminar.

El día ha estado bien. No ha soplado viento fuerte como ayer, temperatura agradable. La gente viste menos abrigada que ayer. Sólo una leve brisa que viene del mar.

Hora: 8:00 p.m. Instalé sólo dos telescopios, el Dobsoniano y el Astrocan; con el primero observamos Júpiter y sus cuatro lunas, que esta noche estaban perfectamente alineadas, mientras que con el segundo, se podía disfrutar de la hermosa vista de La Luna; posteriormente seguimos con el Planeta Marte, y Venus. Saturno y Mercurio, ya no era posible verlos, debido a que se ocultan temprano, casi junto con el sol.

La humedad vino a cerrar el telón de la función nocturna. En la creciente oscuridad de la noche, uno a uno nuestros invitados se fueron retirando. El frío empezó a hacer estrago entre ellos; niños, ancianos, amas de casa, alumnos de la secundaria, campesinos y en fin, una pléyade astronómica, deambuló entre los instrumentos telescópicos esa noche, gozando, preguntando, admirándose de la grandeza del universo.

Don Santiago, un pescador de abulones de antaño, (cuando aún en esta región abundaban) acompañando a su nieto se acercó esa noche a disfrutar con nosotros, antes de partir vino a darme las gracias y me dijo:

___Nunca, desde que yo me acuerde, alguien había traído algo como esto a este lugar, y yo creo que nunca más lo traerán.

___

Colinas del Ejido Eréndira BC.

___ Muchísimas gracias profesor, por todo lo que nos explicó.___ y se perdió con su nieto entre la penumbra hecha casi como de tinta.

El Biólogo llegó ya tarde, y confirmó nuestra visita para el día de mañana a las 7 a.m. en la puerta del criadero. Él personalmente nos guiará por las instalaciones.

Fue toda una noche de fiesta en el DIF. Nos fuimos a la cama pasadas las 11p.m.

La noche, aunque de estrellas era obscura. El silencio crecía, se ensanchaba y se hacía casi infinito.